Las Críticas – Después de Hablar en Público

Luego de cualquier intervención en público es primordial que todo buen orador se retroalimente de las críticas que pueden brindar los asistentes a la misma. Debemos de acercarnos a los asistentes y preguntarles su opinión sincera y objetiva sobre nuestra exposición para de esta forma poder saber los puntos destacados y las fallas cometidas durante la misma.

 Toda esta información es de suma importancia para poder mejorar, acentuando mis puntos fuertes y corrigiendo mis fallas concretas cometidas en la exposición, recordemos que esto es una información veraz acerca de mi intervención lo que me ayuda a hacerme una idea clara del nivel en el que me encuentro.

 

También es bueno filmar la intervención para que luego sea analizada por nosotros, así mismo de una manera sincera y objetiva. Debemos analizar con detenimiento todos los aspectos de la misma como son la voz, los gestos, el lenguaje, el entusiasmo mostrado, el dominio del tema, los movimientos, la seguridad con que se transmitió el mensaje, etc.

 Debemos de ser rigurosos con este analices pero no equivocarnos siendo autodestructivos y bajando nuestros ánimos. La idea de este ejercicio es detectar las fallas y definir cuáles pudieron ser las causas << falta de preparación, nervios, escaso dominio del tema, algún imprevisto con el que no contábamos, etc. >> y que podemos hacer para que esto no vuelva a suceder.

También es clave analizar la soltura, la naturalidad, la credibilidad, la puesta en escena, etc. ya que estos puntos son esenciales para captar el interés del público.

Si en nuestra exposición estuvo alguna persona experta en el tema o un experto en oratoria, debemos de tratar de conseguir su opinión ya que es relevante para mejorar nuestra técnica. Recuerda que la idea es siempre mejorar y que cada intervención que tengamos frente a un público es un ensayo de lujo para una exposición futura así que en cada una de mis intervenciones se debe tratar de corregir los errores cometidos en la anterior.

Entonces, debe de quedarnos claro que el hecho de recibir alguna mala crítica no significa que no sirvo para ser un buen orador y tampoco el hecho de recibir una buena crítica significa que soy el mejor de los oradores, recuerda, y esto para que te quede claro, SIEMPRE SE PUEDE SER MEJOR, así que adelante, sigamos por este camino y de seguro lograremos superar todos nuestros miedos y convertirnos en el orador que siempre soñamos.

Si necesitas ayuda sobre el tema o tienes alguna frustración, no dudes en exponerla dejando un comentario que yo trataré de orientarte para ayudarte.

De todo corazón, quiero ayudarte, gracias.

Ing. Mkt. Christian Vélez